Poesía (31)
  • Leves retazos de un pasado presente

    Leves retazos son ecos de lo que alguna vez fui y el mundo fue en mi, imaginado e incompleto; absurdo y lleno de sentido; radiante como el momento y difuso como la memoria que se vela tras toscos paños de rafia. Un pasado perdido que se reencuentra en este presente escrito, como las cuentas de un collar que rodea mi existencia.


  • Pasos al atardecer

    Un nuevo poemario de Luís Gispert, con muy bellas ilustraciones de un ilustre segorbino, el dibujante Jorge Laffarga. El autor ahonda en los versos de su poesía, inspirada mayormente en la naturaleza. Es una serie donde se afinca la prosa poética, un estilo que el autor ha plasmado siempre en sus libros.


  • Dichas, versos y lamentos

    Suspiros, poemas, quejidos…latidos del corazón, historias que riman, visiones del alma…»Dichas, versos y lamentos» es un libro de 140 poesías, donde el autor deja escapar sus sentimientos a través de las dichas, los goces, los placeres…y los lamentos, las desventuras, las insatisfacciones, todo ello dividido en doce partes, doce capítulos con temáticas tan diversas como son los retratos, las leyendas, los trazos, las pasiones, las añoranzas, los tormentos, las reflexiones, las fantasías, las ilusiones, los rincones, las interioridades…y los títulos (en un original repaso a su obra literaria como final.


  • Miradas Máscaras (tapa blanda)

    En este libro, fotografía y poesía se tornan viaje; viaje a los misterios de la isla de las góndolas y los callejones; viaje por las miradas de personajes que se exhiben y camuflan entre su arquitectura y su cultura. Miradas tras la máscara que encuentran del otro lado la cámara fotográfica que les retrata, las palabras de la poesía que las interpreta sobre el papel.


  • Mujer rota

    Este libro de poemas trata de reflejar la parte oscura, la contradicción, el vacío, el desequilibrio y al mismo tiempo la armonía de uno consigo mismo y de uno con esta vida impuesta que no comprende, y con los que intenta proyectar la justificación de un existir que no tiene coartada si no hay un «algo» que no es nada y lo es todo, lo que en definitiva sería «La esencia del ser».


  • De mi interior

    Bien sentado en el regazo de un fresco rincón, presidido por una fuente parlanchina, paseando por los íntimos caminos de su ciudad o errante a lo largo de un sendero serpenteante, poniendo rumbo a lo incógnito.